La solución pasa por la declaración de un santuario global en el Ártico que prohiba la extracción de petróleo
y la actividad militar en la zona, y que regule las pesquerías y el
tráfico marítimo en aguas polares. Los expertos nos recuerdan que los
yacimientos que aún están sin explotar deben permanecer en el subsuelo y
que habría que desarrollar energías limpias y renovables que, además de
crear millones de nuevos puestos de trabajo, podrían proporcionar
energía a los dos millones de personas que actualmente carecen de acceso
a cualquier servicio energético.
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ResponderEliminarSu blog es muy informativo y tiene unas ideas muy interesantes. Siga así :)
ResponderEliminarGracias por el apoyo.
EliminarTiene unas ideas muy buenas y eso me gusta en las personas, que sean claras y decididas. Te doy mi enorabuena por su página y espero que siga así:))
ResponderEliminarMuchas gracias intentare seguir informando sobre el Ártico. Un saludo.
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